Los históricos gigantes Tomeu i Guida, propiedad de la ciudad de Maó (en la isla de Menorca, Baleares) son unas de esas figuras que, en una época en la que no todos los ayuntamientos podían permitirse tener unos gigantes en propiedad, iban de alquiler de pueblo en pueblo.
La tienda que los alquilaba era la del mismo taller en el que habían sido fabricados, estamos hablando de la barcelonesa “El Ingenio”. De Tomeu i Guida no se sabe la fecha exacta de su fabricación, ni cuales fueron las manos que les dieron forma, pues el taller creaba las figuras y las sacaba al mercado sin crear ningún tipo de archivo referido.
Fue en el año 1934 cuando Tomeu i Guida llegaron a Maó, de alquiler, para pasar únicamente las que en ese año se llamaron fiestas populares de septiembre (actualmente Fiestas en honor a la Virgen de Gracia)y volver de nuevo a Barcelona.
Durante el transcurso de la fiesta la mala suerte o la inexperiencia de los portadores hizo que la giganta sufriera una caída. En frente del mal estado en que quedó la figura, el consistorio mahonés optó por comprar la gran pareja, restaurarla y hacerla propiedad de la ciudad antes que comunicar al propietario en el estado en que se encontraba su giganta.
Se pagaron en ese momento por los dos gigantes, sin vestuario mas seis cabezudos la cantidad de 1035 pesetas.
Los gigantes llegaron a Maó vestidos de rey y reina, pero al haber comprado el ayuntamiento únicamente las figuras sin las ropas, al año siguiente ya se les confeccionaron en la misma ciudad unos vestidos de menorquines del siglo XVIII. Dicho vestuario ha sido renovado en diferentes ocasiones pero restetando siempre la época a representar.
Los hoy históricos Tomeu i Guida ya llevan entre nosotros casi ocho décadas, habiendo llegado al dia de hoy a ser considerados uno de los símbolos de nuestras fiestas patronales y de la misma ciudad.
Con el paso de los años también les aparecieron nuevas figuras gigantinas que los acompañan en todas sus salidas, como son los gigantillos Pere i Gràcia, el enano Miquelet es Salero y también la Giganta “s’Àvia Corema” (la abuela cuaresma), aunque esta última únicamente sale a la calle durante als siete semanas de cuaresma.
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